Combata el calor este verano con medidas que pueden ayudar a conservar el uso de la energía en su hogar.
El verano está en pleno apogeo, y el calor puede hacer que sea tentador bajar el termostato y poner el aire acondicionado a tope, pero el aumento del uso puede conllevar un incremento de la factura de energía mensual. La buena noticia es que usted puede ayudar a reducir su consumo y ayudar a evitar facturas de energía elevadas si aplica estos consejos simples de ahorro de energía.
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Ajuste los termostatos entre 2 y 3 grados más altos entre las 2 p. m. y las 7 p. m. y utilice ventiladores para estar entre 4 y 6 grados más fresco.
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Siga la regla del 4 por 4: si nadie va a estar en casa durante más de 4 horas, ponga la temperatura 4 grados más alta mientras esté fuera.
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Si cuenta con un termostato programable, configúrelo para que aumente la temperatura cuando no está en su hogar y para que luego la baje antes de que regrese. No olvide tener en cuenta las necesidades de sus mascotas.
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Utilice ventiladores de techo o portátiles, ya que lo ayudarán a que el aire circule y la habitación se sienta de 4 °F a 6 °F más fresca. De esta forma, consumirá menos electricidad que al utilizar un aire acondicionado.
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Mantenga cerradas las puertas y ventanas, y evite abrirlas y cerrarlas con mucha frecuencia.
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Utilice tomas múltiples para los dispositivos eléctricos y los equipos de oficina del hogar. Incluso una vez apagados, continúan consumiendo energía eléctrica si están enchufados directamente a la pared. A utilizar tomas múltiples, se elimina este consumo eléctrico innecesario.
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Recuerde mantener bien cerradas las cortinas y las persianas para evitar que ingresen tanto los rayos del sol como el calor.
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Programe las bombas de la piscina para que funcionen a primera hora de la mañana o durante la noche; apáguelas de 4 p. m. a 6 p. m.
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Para mantener limpio su equipo de aire acondicionado, limpie las bobinas y elimine cualquier suciedad que pueda evitar el flujo de aire.
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Cambie los filtros cada 90 días para obtener el máximo nivel de rendimiento de su equipo de aire acondicionado.
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Reduzca el uso de hornallas, hornos, lavaplatos, lavarropas y secarropas durante el día, cuando las temperaturas son más elevadas.
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Utilice el lavaplatos y el lavarropas cuando estén completamente cargados. Siempre que sea posible, deje secar la ropa al aire libre.
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Apagar las luces no solo ayuda a ahorrar energía eléctrica, sino que también genera menos calor.
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Utilice los extractores del baño y de la cocina solo cuando sea necesario, ya que estos reemplazan el aire del interior por el aire del exterior.
Al realizar estos pequeños cambios en su rutina diaria, puede ayudar a reducir su consumo de energía y ahorrar en las facturas de electricidad durante los meses de verano. A continuación, encontrará más consejos para ahorrar energía:
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